Cada alma tras de sí tiene una
historia
una particular y diferente
trotando con su infierno o con
su gloria
marchando con su calma o su
torrente.
Con su ayer que lo envuelve y
que lo asalta
acarreando un pesar de otro
momento
un desliz cometido, alguna falta
que nubla a cada rato el
pensamiento.
Notas oscuras que se quedan
presas
tras un error que llega del pasado
por un abuso, por romper
promesas
que el tiempo no ha omitido ni
ha borrado.
Nadie se escapa de una culpa
hecha
de un paso dado donde malogramos
la acción de un acto que opacó una
fecha
por algo sin pensar que
equivocamos.
Que por prejuicios provocó una
herida
lastimamos fuerte y causamos llanto
por una rabia o la paciencia ida
que arrastrara al otro ser al
desencanto.
Cada alma de por sí carga su
fardo
su antigua realidad, su nebulosa
por haber sido cruel o sido el
dardo
que causara el dolor que hoy nos
acosa.
Que nos lacera en la oscilatoria
negligencia que ronda y que
gravita
en la noche fatal de la memoria
que remuerde, sanciona y que nos
grita.
Cada alma tiene exacta la
evidencia
de un recuerdo que duele y es su
yugo
cada alma tiene un peso en la conciencia
cada alma lleva dentro su
verdugo.
Ernesto Cárdenas.