sábado, 27 de octubre de 2018

De otra esfera...


Su amor viene de otra esfera
de otro mundo que distante
es un modo exorbitante
de cruzar mi cordillera
de abrir la jaula a mi fiera
hambrienta de sensaciones
de empeños y de emociones
que saltan de mis abismos
en formas de paroxismos
de antiguas constelaciones.
 
Es un grito, una evidencia
que teje sobre un reflejo
su recuerdo en el espejo
ya roto de tanta ausencia
es retar la persistencia
que se oxida en los barnices
de la noche, las raíces
marchitas sobre un obseso
que convertido en sabueso
hoy lame sus cicatrices.
 
Su amor es pájaro breve
que canta alegre y febril
bajo este cielo de añil
que me asombra y me conmueve
que le da luz y relieve
a un milagro en los cristales
de retos argumentales
por alcanzar la paloma
de su risa que se asoma
y alegra mis vendavales.
 
Ernesto Cárdenas.

viernes, 26 de octubre de 2018

Con este afán...


Con este afán la realidad dispuso
que el tiempo transcurriera en sus barnices
y sepultara una ilusión que puso
entero el corazón en sus raíces.

Tras una fe que en su extensión abriera
la fuerza de un empeño en sus ardores
para cerrar al mundo la frontera
y duplicar amando los furores.

Por avivar en su eclosión la llama
soberbia en su pasión frente al suceso
y no aceptar que se rompió la rama
del árbol que fue nido para un beso.

Que desvirtuó la ruta en el espasmo
en un intento por romper los sueños
y derribar de ayer el entusiasmo
para enfriar la brasa de los leños.

Con este afán esta expresión cimera
y hermosa para un ansia en el encuentro
nunca cerró la puerta a esa manera
bonita de un amor que habita adentro.

Ni nunca pudo destrenzar lo oscuro
la voz eterna de una rima vasta
por la porfía que allanó aquél muro
y demostrara una pasión de casta.

Con este afán por conservar la regia
ansiedad más allá del torbellino
supimos mantener la senda egregia
para amar aún en contra del destino.

Ernesto Cárdenas…

De magia y de corazones...


Todo dice y acredita
que el pensamiento es la base
espiritual de una frase
sublime que facilita
desahogar lo que palpita
en todo lo que se extrema
en la letra, en el esquema
de un reto que concluyente
nos abraza y simplemente
forma el cuerpo de un poema.
 
Por razón individual
de cada naturaleza
contextual en la destreza
de una idea elemental
de un algo ceremonial
que se dicta y legitima
la conquista de una cima
con pasos emocionales
para soltar los zorzales
cantarines de una rima.
 
Que nos brota de  la mente
en un empeño de alas
con tesón en esas galas
de un universo coherente
de un delirio impenitente
que entre sus ansias se anuda
nos da pasión testaruda
para encender una hoguera
donde el alma aunque no quiera
al escribir se desnuda.
 
Escribir es navegar
por dentro buscando lumbre
es tener la certidumbre
de un algo espectacular
es un fin por conciliar
la fe con con las sensaciones
el nervio con las pasiones
más allá de una quimera
y es cruzar una frontera
de magia y de corazones.
 
Ernesto Cárdenas.

jueves, 25 de octubre de 2018

Vivo en un mundo...


Vivo en un mundo en donde las cosas
tienen la intensidad de las mareas
tienen para escribir las silenciosas
noches sin tiempos donde preño ideas.

Un mundo que me grita cuando plasmo
cuando lucho en mi afán con el idioma
un mundo que me lanza a ese marasmo
de mil palabras que mi mente doma.

Que las ubica en el ritual de un sano
motivo de un instante extraordinario
en donde logro ese milagro arcano
de vencer con mi empeño el diccionario.

Por saber encontrar tras lo que observo
más que una apofonía relaciones
por un decir feliz en donde el verbo
me da con sus vocablos bendiciones.

Vivo en un mundo de pasión que justo
se basa en la expresión para el mensaje
un mundo grato en donde el buen gusto
vincula la emoción con el lenguaje.

Con un sistema en que se conjuran
el ritmo natural con el talento
con un esmero en que se capturan
las musas para hablar del sentimiento.

Ese que avala, que no impone un veto
para mezclar estrofas y sonidos
simétrica intención para un gran reto
de entender de perfumes y de nidos.

Vivo en un mundo de especial vehemencia
que encuentra en lo que arrulla su diseño
un mundo que me da la independencia
de ser yo con mi rima y con mi sueño.

Ernesto Cárdenas.

Como será...


Como será después cuando la vida
detenga mi reloj, corte mi rito
mostrando del misterio otra avenida
en otra realidad y otro infinito.
 
Para otro errar sin tiempo ese tablero
de un ajedrez eterno en que se hilvana
la sombra en otro afán donde ligero
mi cuerpo se hace polvo sin mañana.
 
Como será cuando el olvido tape
recuerdos ya sin fechas, sin ocasos
cuando la bruma en su quehacer atrape
los últimos sonidos de mis pasos.
 
Mi identidad sin luz donde no anima
la fe para alcanzar mis objetivos
en medio de otro azar donde la rimas
silencian para siempre sus motivos.
 
Como será ese instante, ese momento
ese no ver las nubes ni el entorno
ese perder el sueño y el aliento
ese cruzar la puerta sin retorno.
 
Sin otra amenidad frente al abismo
que se abre en su verdad ilimitada
donde el grito enmudece y uno mismo
se encuentra frente a frente con la nada.
 
Como será mi Dios ese suceso
cumplido sin sonrisa y sin reflejos
ese total andar sin retroceso
que borra la silueta en los espejos.
 
Como será ese día que me ausente
del mundo en cumplimiento con lo estricto
como será mi hora concluyente
sabiendo inapelable el veredicto.
 
Ernesto Cárdenas.

miércoles, 24 de octubre de 2018

Bastaban corazón y sentimientos.


 
Fue su existencia un batallar con todo
para lograr del reto un rigorismo
la erudición completa para un modo
de alcanzar con su estudio el clasicismo.
 
De superar en cada acción la cumbre
la letra en su equilibrio y trascendencia
para encender con su saber la lumbre
que rozara en cada tema la excelencia.
 
Andaba por los libros, por aquello
del estudio y su fe que era baluarte
para una amenidad y ese destello
contextual de su empeño y de su arte.
 
Y supo hacer un rito en la cultura
cuidando la semántica y la diáfora
con lógica tenaz en la estructura
y el uso torcido de la anáfora.
 
También de Aristóteles la diéresis
y de un texto la cruda antilogía
el verbo cortado del aféresis
y lo duplo de alguna homofonía.
 
Conoció natural el aforismo
y del griego el crespón del epigrama
la típica función del silogismo
y el cambio de grafema en paragrama.
 
Y todo para ser más excelente
buscando en las alturas pensamientos
sin saber que a su rima solamente
bastaban corazón y sentimientos.
 
Ernesto Cárdenas…

martes, 23 de octubre de 2018

Marisela Verena y Willie Chirino Somos Tal Para Cual


Atado voy con la noche...


 
Atado voy con la noche cabalgando en un libro
por las calles del tiempo donde soy, donde vibro.
 
Donde escucho distante de otro ser los latidos
entreabriendo la puerta de otros siglos ya idos.
 
De otro instante en que un alma se encontró en la odisea
defendiendo valiente el valor de una idea.
 
Contra  todos y en contra del temor, por si mismo
al momento de verse desafiando el abismo.
 
Por su paso constante, por su brava manera
Por un acto que le hizo encender una hoguera.
 
Pues no estuvo conforme con el ritmo ni el rito
con aquél que pensaba que el destino está escrito.
 
Que no había otra forma de luchar, ni otro puente
por cruzar en la vida para ser diferente.
 
Atado voy con la noche meditando en los seres
que siguieron su norte buscando amaneceres.
 
Que supieron la norma de romper con el miedo
Y pusieron su empeño con pasión sobre el ruedo.
 
Porque siempre existieron corazones con ganas
de trazar un camino y tañer sus campanas.

Para ser ellos mismos en afán atrevido
para un día marcharse con el sueño cumplido.
 
Ernesto Cárdenas…

lunes, 22 de octubre de 2018

Para...


Para el amor se hicieron desafíos
para marchar, andar borrando huellas
para ese levitar con nuevos bríos
para arrancar de adentro las querellas.

Para entregar entera la confianza
para olvidar abiertas cicatrices
para marcar el ritmo en la esperanza
para llegar profundo a las raíces.

Para escapar del miedo y del conflicto
para encontrar precisa una salida
para dictar un dulce veredicto
para encontrar el rumbo de la vida.

Para entender un algo que se agita
para encender el alma como un cirio
para escuchar aquello que nos grita
para enredar la piel con el delirio

Para formar con besos un camino
para volcar el sueño en el instante
para inventar de noche un torbellino
para sentir su amor en lo importante.

Para habitar feliz en el exceso
para dejar de ayer la otra memoria
para sentir el mundo en cada beso
para escribir con risas otra historia.

Ernesto Cárdenas.

Hasta esa cita...


 
Vivir la vida y comprender la historia
para evitar los tumbos del camino
y nivelar andando otro camino
con otro nuevo giro y otra historia.

No atar empeños a las vanas cosas
saber que el tiempo nos achica el paso
y en cada aurora recordar el paso
antiguo de un error y de otras cosas.

Ladear complejos navegar con risas
pensando natural sin ataduras
y romper otras viejas ataduras
en busca de otra luz y de otras risas.

Eso es lo hermoso de la vida plena
el entender que todo es pasajero
para no ser el triste pasajero
que perdió el rumbo de la ruta plena.

Y así marchar sin miedo ante la muerte
cuando se agote la existencia un día
porque existimos un día y otro día
hasta esa cita exacta con la muerte.

Ernesto Cárdenas

domingo, 21 de octubre de 2018

Mis zapatos...

Estás formas de cuero que recubren
éstos pies que sostienen mi estatura
hoy mis ojos lo ven y los descubren
después de mucho tiempo en andadura.

Son razones que ayudan desde abajo
y apenas al mirarlos adivino
el silencio esforzado en un trabajo
que las piedras conoce del camino.

Compases de un ritual, una armonía
una verdad que miro y que repaso
una lección para esa anatomía
que enmarca una razón tras cada paso.

Estas formas de cuero que contemplo
revelan sin saber, sin vanagloria
la humildad en el suelo dando ejemplo
de un valor que en el polvo escribe historia.


Ernesto Cárdenas.

Divino...


Divino fue el momento de conocerla un día
de hacerla en mi coraje rabiosamente mía.

Rompiendo escepticismos en esas conclusiones
que saben de los besos y de las conmociones.

De las revelaciones del alma en lo apremiante
donde la vida toca el cielo en ese instante.

Y en ese desatino completo que desata
el rojo del delirio que habita en la fogata.

Divino fue ese grato motivo en lo evidente
que supo conmovernos y se hizo trascendente.

Girando en el recuerdo de aquella contextura

bonita de un deseo que eclosionó en ternura.

Para sentirnos plenos y decorar hervores
para explorar la noche y cabalgar furores.

Divino fue ese encuentro que levitó niveles
y luego para siempre se nos tatuó en las pieles.

Ernesto Cárdenas.

sábado, 20 de octubre de 2018

El amor del hombre lobo...


En ésta noche la leyenda robo
por la ansiedad nerviosa que no frena
ganas tal vez de convertirme en lobo
y aullar tu amor bajo la luna llena.

Ya sé que esto es locura si se mira
sin la pasión interna y verdadera
por un amor que de ilusión delira
queriendo solo amar a su manera.

Correr los montes y olfatear tu aliento
sin nadie detenerme que se atreva
y soñar con las notas de tu acento
complacido en el fondo de mi cueva.

Mas si un día me ponen en prisiones
haré de aquella jaula una tribuna
no cansaré de aullarte en mis pasiones
y sentirás mi amor en cada luna.

Ernesto Cárdenas.

viernes, 19 de octubre de 2018

El amor del vampiro...


Tal vez lo que yo diga a nadie incumba
pensando natural que aquí deliro
por querer escaparme de ésta tumba
y volar hasta ti como un vampiro.

Pasar entre las sombras cual reflejo
apartar con mis manos tu cabello
y sin mostrar mi forma en el espejo
encarnar mis colmillos en tu cuello.

Llevarte a mi aposento bien dormida
sin delatar mi andar por el pasillo
y compartir contigo la otra vida
en la tétrica humedad de mi castillo.

Y ya después no importa si amanece
tras mi pasión sentida y demoníaca
ni si mi alma por tu amor perece
bajo el filoso golpe de una estaca.

Ernesto Cárdenas.

jueves, 18 de octubre de 2018

El amor de la momia...


Vengo de antiguas eras, de las sendas
perdidas de otra historia otra avenida
cubierto con el polvo y con las vendas
que envuelven mi silueta de otra vida.

En busca de lo tuyo tras la arena
ardiente de la espera en mi escenario
vengo para entregarte la azucena
que anuncia un color grato en mi calvario.

Con paso lento de un afán remoto
pretérito de esfinge y faraones
vengo para entregar como un devoto
las flores de mis nuevas ilusiones.

Para romper con todo, con el filo
cansado de pirámides y ayeres
y navegar unidos por el Nilo
rimando por un beso amaneceres.

Vengo para enfrentarme con la muerte
retando esa deidad que no se nombra
vengo con la intención de no perderte
vengo a encontrar tu luz desde mi sombra.

Ernesto Cárdenas.

El amor de Franskestein...


No importa que fundido en cien pedazos
contorne diferente mi armadura
ni de afuera me lleguen los rechazos
por miedo de mi aspecto y mi estructura.

Por este siluetear lo diferente
en medio del dolor y mis querellas
por este contemplar la horripilante
pavura de mis manos como estrellas.

No importa caminar por los fracasos
con formas que delinean tremebundos
rituales de otra vida y de otros pasos
extraños que parecen de otros mundos.

Si tengo en mi interior una apertura
otra razón que vibra en la constancia
y ajeno del terror tras la envoltura
respiro del amor otra fragancia.

Si riego con mis sueños las ternuras
que laten calibrando un sentimiento
y tengo natural esas dulzuras
que cambian en mí ser el argumento.

No importa que diverso en entidades
te siga para darte lo más tierno
con este corazón sin falsedades
que guardo para ti desde mi infierno.

Ernesto Cárdenas.

miércoles, 17 de octubre de 2018

Cada día es una vida...


Cada amanecer es el comienzo de una nueva vida que nos da Dios, es toda una existencia si se vive consciente de que cada intervalo del tiempo cuenta, de que cada movimiento del minutero nos abre una oportunidad para respirar y para actuar, porque desde el amanecer a la noche, en esas pocas horas se dan todos los procesos para desarrollar una idea y para entender el sentido del mundo que nos rodea, hay precisamente un insecto llamado efímera que nace con el alba, se desarrolla y procrea durante el día para luego morir al caer la noche, o sea que en un breve lapso se encierra su total existencia, y con ese ejemplo de fugacidad del tiempo, con ese razonamiento nosotros los humanos debemos interpretar, entender en su misterio la vida que nos toca, y ver en cada día un renacimiento, un espacio con milagros frente a nosotros, un regalo del cielo con cada salida del sol, o sea, tratar de hacer en 24 horas cada vez una existencia nueva, un alumbramiento inédito, una ecuación flamante para vivir muchos veces en la historia, para entender que en lo sucinto, que en la limitación se puede hacer magia, se puede escribir un capítulo nuevo, y tener una vida plena en el corto espacio de unas horas.
 
Hay un mundo en cada día
de una entelequia total
y un lapso fundamental
con propia cronología
un tesón en la porfía
del alma que pide más
que rompe con el compás
del conformismo y del sueño
para triunfar con su empeño
sin decir nunca jamás.

Porque un día es todo un rito
de nacer cada mañana
de sentir que se engalana
de luces nuestro infinito
es un comienzo bendito
de sentir como una esencia
otro modo a la excelencia
de entender el universo
en los renglones de un verso
que tiene cada existencia.
 
Es pensar que en algo breve
se puede encerrar la dicha
y jugar con esa ficha
del corazón que se atreve
a sembrar sobre la nieve
un clavel de bienvenida
a otro instante sin medida
del ocaso a las auroras
y entender que en pocas horas
puede vivirse una vida.
 
Ernesto Cárdenas.
 

Con otro corazón...


Yo voy a amar vendrán las ilusiones
con otra realidad muy diferente
y fingiré vibrar con la pasiones
dejándome arrastrar por el torrente.

Seré uno más que sangra por la herida
sin nada relevante en sus andanzas
que se levanta después de la caída
y vuelve a navegar sin esperanzas.

Mezclando con la sombra la existencia
girando sin salir del torbellino
viviendo ese exterior de la apariencia
que sabe de mi grito y de mi sino.

Yo voy a amar lo sé aunque incomode
al alma otro cariño venidero
con otro corazón sin que se enlode
el limpio corazón con que te quiero.

Ernesto Cárdenas.

Se fue de ella...


Se fue de ella soslayó reflejos
de aquél amor que lo marcó en su andanza
entró en la noche contempló de lejos
la antigua realidad de su esperanza.

Giró sus pasos se arrancó de adentro
el entusiasmo abierto y su alegría
buscó tangentes esquivando el centro
de un sueño de otro ayer que lo envolvía.

Rompió con todo y tomó otra ruta
lejana para un raudo itinerario
y así en silencio se encerró en la gruta
oscura que indicaba su calvario.

Se fue de ella por no ser el mismo
aquél que la sentía como un canto
se fue de ella y ensanchó el abismo
se fue de ella por amarla tanto.

Ernesto Cárdenas.

martes, 9 de octubre de 2018

Poema para una reflexión...


Este existir creyéndolo absoluto
es solo un respirar en lo diverso
somos en realidad ese minuto
que pasa sin notarlo el universo.

El tiempo es todo y nada, es teoría
de un algo en ésta noche que evidencio
y la vida un instante, es energía
que luego será pasto del silencio.

No vale soslayar la primavera
aplazar ese bien que se divisa
esquivar ese amor que nos espera
y matar por temor una sonrisa.

Si un día natural retornaremos
al polvo, a la sombra y al olvido
y nada quedará de lo que hoy vemos
y menos quedará de lo vivido.

Ernesto Cárdenas.

lunes, 8 de octubre de 2018

Amar...


Amar es comprender...es darlo todo
abrirse el corazón, no es un secuestro
es dar y recibir, es ese modo
sin pensar "esto es mío" sino "nuestro"

Es sentir que los dos son uno solo
compartiendo la alegría y los dolores
natural como un dulce protocolo
recordando que los dos tienen valores.

Amar es converger en el momento
conocer que entre dos forman un centro
es querer con un solo sentimiento
redoblando la pasión en cada encuentro.

Es buscar la sonrisa en los instantes
intentar descubrirse en nuevos besos
y arropar en el alma fascinantes
emociones de profundos embelesos.

Amar es alejar lo que separa
y crecer en las cosas que los une
es tener la mirada siempre clara
celebrando la razón que los reúne.

Amar es lo perfecto de una rima
que en poema cada noche se convierte
amar es ese verbo que sublima
amar es no olvidarse ni en la muerte.

Ernesto Cárdenas.

domingo, 7 de octubre de 2018

Todo lo tuyo...


Todo lo tuyo amor es estetismo
que anuncia en su ritual lo que prestigia
o conclusión que apoya un silogismo
precioso como un búcaro de Frigia.

Del alma eres la magia porque encanta
sentir junto a lo tuyo ese desvelo
pulido en ésta noche que adelanta
un cuento medieval de terciopelo.

Todo lo tuyo es luz y evocaciones
bonitas tras la vida que te premia
en una transparencia de emociones
como un cristal magnífico de Bohemia.

La dulce sensación de lo divino
sublime en el sentir donde me enfrasco
por tender a tu paso en el camino
lo terso de una alfombra de Damasco.

Que más podré decir cuando presagia
lo hermoso éste cariño sobrehumano
que más podré decir si eres la magia
sublime como un lienzo de Tiziano.

Ernesto Cárdenas.

sábado, 6 de octubre de 2018

La sombra...


La sombra es sombra desde aquél instante
en que el espacio inabarcable era
el lecho del horror y aglutinante
vigilia de otro eclipse y de otra esfera.

Lo denso, lo inasible tras los muros
complejos de lo abstracto y de la bruma
sustancia del azar en los conjuros
antiguos de otra esencia y de otra suma.

Reliquia arrebatada a ese vacío
etéreo de infinito y nebulosas
fantasma reiterando el desafío
perenne del silencio y de las cosas.

La sombra rige el acordeón alterno
del lúgubre crespón que nos contriste
vastedad de un evento en ese eterno
existir de lo umbrío y de lo triste .

La cima de una niebla, de un suceso
retórico del tiempo y del estigma
lo oculto condensado en ese obseso
extraño de lo absurdo y del enigma.

El génesis cerrado, lo execrable
la inercia, lo inconexo a la mirada
el vértigo, el arcano, lo insondable
de un sueño, de un epílogo y la nada.

Ernesto Cárdenas.

jueves, 4 de octubre de 2018

Diversidad mística...


Si viviera mujer en el desierto
de la Arabia una paz grata y bendita
me pasara sin dormir horas despierto
por ti rogando a Alá en una mezquita.

O si el azar con todo lo que anuda
me hubiera dado un alma muy piadosa
por lo tuyo meditara  junto a Buda
en la India milenaria y misteriosa.

Más si fuera judío en Galilea
que en la noche a la cábala interroga
con afán dedicara mi alma hebrea
a orar por ti a Jehová en la sinagoga.

Porque alcanza el amor mil religiones
en la fe del poeta y su universo
tras su Dios que delinea perfecciones
a través de la luz y de su verso.

Ernesto Cárdenas.