domingo, 30 de septiembre de 2018

el rincon de mis ancias (polo montañez)


Jeanette - Corazón de poeta (Letra)


Es menester...


Es menester que sepas que vibro en las tensiones
cuando el recuerdo asoma tu luna en mis balcones.

Cuando tu voz me enreda en ese deleitante
motivo que reafirma que tu eres lo importante.

Que solo en ti se ajusta la fe de un arrebato
que araña su nostalgia de noche como un gato.

Y es que le das al alma un cauce en la medida
exacta para un beso que eleva y no se olvida.

Que muestra su universo en esta madrugada
donde sin ti mis pasos se pierden en la nada.

Es menester que sepas que todo se enraíza
para un florecimiento detrás de la ceniza.

Para un presentimiento que escala en su impaciencia
la cima de un delirio y de una efervescencia.

La ruta en eso bello de un grato itinerario
alegre para un grito que se hace necesario.

Para escribir la historia de un verso diferente
para buscar tu abrazo luchando en el torrente.

Es menester que sepas que hay una sinfonía
en todo mi horizonte cuando te pienso mía.

Ernesto Cárdenas.

sábado, 29 de septiembre de 2018

QUERIDO AMOR- POLO MONTAÑEZ


Como cualquiera...


Tanto afán, tantos fervores
por alcanzar una meta
por lograr esa completa
realidad de los valores
pasar tantos sinsabores
tras una exacta medida
sangrando por una herida 
que en el rumbo se ha tenido 
pensando que se ha cumplido
con ser alguien en la vida.

 
Tanto nervio, tanto obseso
en la historia y en el paso
tanto encontrar el fracaso
y retornar al proceso
de ese diario suceso
de existir que nos anima
para escalar esa cima
de todo lo que anhelamos
en medio de lo que amamos
y aquello que nos lastima.

 
Tanta risa, tanto llanto
tanta esperanza frustrada
tanto sufrir la emboscada
de un dolor o un desencanto
tanto callar ese canto
que expresa nuestra manera 
de algún sueño, alguna espera
en busca de lo ideal
tanta lucha y al final
morirnos como cualquiera.

Ernesto Cárdenas.

viernes, 28 de septiembre de 2018

Andar por dentro...


Andar por dentro de nosotros mismos
lejanos de curiosos y de amigos
por nuestras cielos, por nuestros abismos
por nuestros ritos donde no hay testigos.

Es encender la luz de otros rincones
de otra visión trenzada en lo infinito
es desatar sonrisas y emociones
y también una lágrima o un grito.

Como escuchar la nota de un latido
que traza en sus afanes estructuras
como un delirio donde lo prohibido
altera en su inquietud temperaturas.

Andar por dentro es ser un peregrino
abstracto que el deseo cristaliza
es encontrar detrás del torbellino
el fuego que aún calienta la ceniza.

Es suprimir los miedos, romper lazos
dar rienda al corazón sin los sonrojos
es reunir del ansia los pedazos
es liberar del alma los antojos.

Andar por dentro es emprender un viaje
por la imaginación, por lo diverso
es liberar la idea, ser oleaje
para vivir soñando otro universo.

Ernesto Cárdenas.

jueves, 27 de septiembre de 2018

Como Lázaro de nuevo...


Yo se que tras lo tuyo se transforma
mi realidad en otra disyuntiva
y en otra conmoción para esa norma
de amar con claridad definitiva.

Por esto que alucina y me conmueve
que me alegra, me envuelve y que me encumbra
como un rosal en medio de la nieve
que puso color nuevo en mi penumbra.

Yo se que amarte mucho desafía
el orden de las cosas y el destino
la esencia, la emoción, la astrología
la lágrima, la sed y el torbellino.

Que reto a cada paso lo imposible
buscando sin hallar una salida
un equilibrio en fin que sea factible
con este panorama de mi vida.

Con este batallar contra la historia
tenaz en mi demencia o en mi empeño
con este retener en la memoria
tu beso como un salmo y como un sueño.

Un grato acontecer, una firmeza
detrás de la plegaria que ahora elevo
pues salí con tu amor de mi tristeza
para andar como Lázaro de nuevo.
 
Ernesto Cárdenas.

miércoles, 26 de septiembre de 2018

Serventesios para mi arte...


Y te contaba amiga que yo plasmo
la idea como un reto sin censura
poniendo el interés y el entusiasmo
en cada realidad de mi aventura.

Para decir en versos lo que sueño
lo que traza un tesón en mi contienda
lo que me ínsita a andar por ese empeño
de letras que subyugo en cada senda.

Hablar de lo que quiero sin retraso
provocar el idioma que me anima
y enfrentar sin fatiga en cada caso
la trama de un escollo en cada rima.

Sin que importe luchar con la incoherencia
lo intrincado de un hecho en su mensaje
me basta con mi afán, con esa esencia
exacta donde impero ante el lenguaje.

Ante cada ocasión, cada dilema
cada tramo o constancia donde yazgo
y si encuentro una traba en mi poema
duplico mi batalla hasta el hartazgo.

Para triunfar, alzar el estandarte
retando más allá el vocabulario  
para lograr al fin vencer el arte
domando con pasión el diccionario.

Ernesto Cárdenas.

martes, 25 de septiembre de 2018

Anduvo por el mundo...


Anduvo por el mundo, por la historia
trayendo con bondades la confianza
y en esa realidad que fue notoria
nos puso para el paso una esperanza.

Fue caridad, entrega y mansedumbre
sentimiento, equidad y fue altruismo
el albor, la promesa, fue la lumbre
para apartar al hombre del abismo.

Para otro amanecer, otro paisaje
otro modo preciso en cada acto
para plantar en todos el mensaje
para trazar un rumbo hacia lo exacto.

Anduvo por el mundo, por nosotros
por todo aquel que siente, aquel que labra
la piedad extremada en esos otros
que jamás conocieron su palabra.

Ni supieron de paz, ni del consuelo
que sabe levantar en la caída
ni escapar para siempre de ese duelo
del error, de la sombra y de la herida.

Su entrega fue total, fue un ejercicio
que se enfrentó al tormento en ese fiero
empeño del maligno que en su oficio
clavó su cuerpo un día en el madero.

Para acabar su ejemplo, por borrarlo
hacer de aquella acción una acción vana
extirparlo de las mentes, de eclipsarlo
para dejar al mundo sin mañana.

Pero venció la luz, ganó lo tierno
ampliando el horizonte de la vida
no pudo deshojar aquel invierno
su recuerdo después de la partida.

Anduvo por el mundo en sus razones
por la fe, por lo bello, por salvarnos
anduvo por el mundo con perdones
anduvo para todos… por amarnos.

Ernesto Cárdenas.

Poema para el tiempo...


El tiempo… ese infinito de las cosas
que mide sombras, luces y emociones
acorta la existencia de las rosas
y al hombre lo despoja de ficciones.

Lo pone frente a frente con la historia
con su razón de ser tras cada acto
con todo lo que gira en esa noria
que tarde da a entender lo que era exacto.

Ya que despierto un día se da cuenta
que el tiempo lo cambió, le dio otro rumbo
y le hizo comprender en forma cruenta
que anduvo por el mundo tumbo a tumbo.

Sin entender al fin lo que era grato
al alma en su razón y en su alborada
tras otra nimiedad, otro arrebato
que luego se fugó sin dejar nada.

El tiempo nos sorprende, nos asoma
a la otra facultad que nunca miente
nos hace anochecer y nos desploma
sin nada ya que hacer en el presente.

Porque no puede reincidir lo ido
ni florecer para otra acción la huerta
el pájaro de ayer no vuelve al nido
y cada acontecer cierra una puerta.

Golpea cada sueño, nos naufraga
en otra realidad que nos abruma
en otro devenir que ya no halaga
pues flota sin porqué como la espuma.

El tiempo es el misterio de otra esfera
que no tiene piedad ni da indulgencia
no repite jamás la primavera
lo que se fue se fue, es la sentencia.

Ernesto Cárdenas...

viernes, 14 de septiembre de 2018

Poema de los pasos...


Pasos que fueron, pasos que vinieron
por mil razones o tal vez ninguna
pasos de ayeres que reprodujeron
un rumbo bajo el arco de otra luna.

Pasos diversos semejando rimas
que un día culminaron la jornada
pasos con suerte que alcanzaron cimas
pasos de un sueño que acabó en la nada.

Pasos con risas de un antiguo agrado
de otro momento de un sentir preciso
o los fatales que por un pecado
perdieron su horizonte al paraíso.

Pasos con prisas que en sus emociones
siguieron esa voz del sentimiento
y otros cansados por aberraciones
que hundieron su equilibrio en un tormento.

Pasos alegres de una fe que innata
le dieron un color a sus andanzas
o los oscuros que el dolor delata
después de sepultar sus esperanzas.

Pasos de un tiempo que a volver repiten
un cause amargo por arroyos secos
pasos que solos en su andar emiten
sonidos sordos de apagados ecos.

Pasos de un viaje sin alternativas
por calles frías de un extraño azar
pasos gastados sin espectativas
como un empeño que acabó en el mar.

 
Ernesto Cárdenas...

Rimas para el ocaso de la vida...


Miremos hacía atrás rememorando
la historia que dejaron mil sucesos
mil emociones que fueron delineando
la vida con su freno o sus excesos.

Miremos sin quitar ni agregar nada
sin escusas, sin justificaciones
miremos para ver si fue adecuada
la ruta que hoy nos trae meditaciones.

Miremos para ver donde sin causa
dejamos un dolor, donde matamos
una ilusión para seguir sin pausa
buscando una verdad que nunca hallamos.

Cuando seguimos la pista a los errores
trotando pertinaz una quimera
y relegamos del alma esos valores
que ignoran con sus actos los de afuera.

Porque las cosas son de otra manera
luego de verlas bien cuando han pasado
cuando lejana quedó la primavera
y el tiempo nos presenta ante un juzgado.

Ese del otro ayer, de la conciencia
que puede ser sonrisa o ser flagelo
ese que solo al fin con la experiencia
arranca los disfraces, quita el velo.

Porque nos pone en otra perspectiva
de lo que fue correcto o fue incorrecto
porque nos dice si oscura o positiva
trazamos nuestra marcha en el trayecto.

Miremos hacía adentro simplemente
tal como somos sin variar el paso
miremos para vernos frente a frente
llegado ese momento del ocaso.

Solo para entender eso que hicimos
ya al borde natural de la partida
lo que perdimos o lo que obtuvimos
andando en esas calles de la vida.

Ernesto Cárdenas.

Rimas a las nubes...


Nube de armiño que en la altura trotas
llenando de algodones el paisaje
como una remembranza de gaviotas
con sueños en las alas para un viaje.

Que cruza el firmamento sin fronteras
en el nácar de tu rumbo peregrino
andando por los tiempos y las eras
con tu eterno color alabastrino

De ese vagar sin pactos ni ataduras
que reta el horizonte en su elemento
de ese rimar su fuerza en las conjuras
del cielo que es su techo y su argumento.

Nube que flotas sin temor a errores
en el azul sin fin de tus espacios
y en esa majestad de tus vapores
con formas de animales y palacios.

Con los dibujos y con los arpegios
que muestran tu crespón blanco o moreno
con tus lloviznas, tus perfiles regios
donde se esconde el estertor del trueno.

Ernesto Cárdenas.

Voy a escribir...


Voy a escribir por todos los que amaron
y algo les puso al frente sombra y cruces
a escribir para aquellos que dejaron
el alma en un afán de amor y luces.
 
Para esos corazones que se abrieron
como ventanas a un querer galante
por ilusiones que una vez le hicieron
atar su realidad a lo importante.
 
Y sin embargo no tuvieron suerte
en ese empeño de un amor bonito
para encontrar esa razón que fuerte
llegara como un salmo al infinito.

A concretar un hecho en eso grato
que hace de las sonrisas los consuelos
a penetrar con prisa a ese arrebato
que sabe de esperanza y caramelos.
 
Voy a escribir para esas emociones
que nunca se rindieron al camino
para esos que sufriendo decepciones
supieron no ceder al torbellino.
 
Para esos que ceñidos a las bridas
del sueño no apagaron su latido
para esos que a pesar de sus heridas
aún sienten que el amor no está perdido.
 
Ernesto Cárdenas.

Vale la pena amar...


Vale la pena amar si se nos ama
si existe un paralelo en el afecto
si se funde la llama en la otra llama
y todo es melodía en el trayecto.

Si vemos que hay un mismo acercamiento
para una realidad sin titubeos
si los ata feliz un sentimiento
y es mutua la inquietud frente al deseo.

Pues nada da razón para la marcha
si en la ruta se pierde la constancia
y amar de un solo lado es esa escarcha
que mata el corazón y la fragancia.

Que pone nulidad en la entereza
formando con el tedio un desbalance
dejando en cada noche una tristeza
ajena de la risa y del romance.

Vale la pena amar cuando conforma
el sueño una ilusión que encuentra un eco
lo contrario no es amar es otra forma
sedienta de encontrar un pozo seco.

Vale la pena amar en la medida
de juntos ser pasión y magnetismo
lo contrario es vivir sobre una herida
y habitar por cobardes el abismo.

Ernesto Cárdenas.

Con un beso


La buscó mucho por la vida entera
trotando entre la noche y el delirio
borrando en su agonía aquél martirio
oscuro y comenzar de otra manera.

Puso su empeño en sepultar ayeres
de soslayar arcaicos desvaríos
para dejar de lado aquél sombrío
pasado que asfixiaba amaneceres.

Tomó su anhelo y apuró la prisa
contento de su amor y del suceso
que ampliaba en su entusiasmo la sonrisa.

La amó con ganas, duplicó el exceso
tras eso que llegando se precisa
y enreda para siempre con un beso.

Ernesto Cárdenas...

La extraño...


Yo la extraño señor porque me ha dado
dos alas para alzar mis ilusiones
y una emoción sincera en ese grado
que anuda hasta la rabia mis pasiones.

La extraño con afán definitivo
atado a la inquietud para el encuentro
la extraño por ser luz y ser motivo
de un fuego que me quema desde adentro.

Por ser para mi noche la armonía
que flota entre el delirio y el incienso
por compartir esa filosofía
bonita de una fe cuando la pienso.

La extraño desde aquí, desde mi senda
desde mi angustia grave y mi infinito
desde esta realidad en la tremenda
ansiedad de mi sangre y de mi grito.

Ernesto Cárdenas.
 

jueves, 13 de septiembre de 2018

No sé como llegaste...


No sé como llegaste y tocaste
el arpa azul que guarda el sentimiento
rompiendo con tus notas los instantes
del hilo que me ataba al desaliento.

Grata sorpresa que tocó mi puerta
perfumes vaporosos en la estancia
y un alma que si dudas se despierta
sintiendo de la vida la importancia.

No sé como llegaste y envolviste
aullidos de mi fiera en la confianza
haciendo comprender que estás, que existe
la terca realidad de mi esperanza.

Sonrisas que sorprenden tras el muro
estrellas que regalan sus matices
y besos complotados al conjuro
que saben de la magia y las raíces.

No sé como llegaste y pusiste
un freno con tu amor en mi reproche
y dulce en tu interior también me diste
luciérnagas en medio de la noche.

Misterios del amor que profundiza
anhelos que desbordan sensaciones
que saben arrancar de la ceniza
el fuego que devora corazones.

Ernesto Cárdenas.

Décimas para la poesía...


Verso y música, armonía
atados para un conjunto
de solfeo y letra al punto
que esculpe la simetría,
la canción es poesía
universal sin enconos
donde se elevan los tronos
divinos de la cultura
y de esa literatura
proporcional a los tonos.

Donde hay resonancia hay vida
y la vida es un poema
de sones en la suprema
equidad de la medida
digamos que es la sentida
realidad que comunica
el alma que certifica
la relación cuando vibra
esa fe que se equilibra
por dentro y nos glorifica.

Un verso es un pentagrama
alado que nos transporta
o un ritmo que reconforta
lo que se sueña o se ama,
es algo que se derrama
desde siempre y que contagia
lo que se siente y presagia
de entusiasmo poseído
en el compás de un latido
sincronizado a la magia.

Un poema es un proceso
de número y de cadencia
es armar la equivalencia
que nivela el contrapeso
es descubrir el suceso
que salta de la emoción
es espíritu y pasión
que desborda el sentimiento.
y lira del pensamiento
que ejecuta el corazón.

Ernesto Cárdenas.

Amarla...


Amarla en absorción, es el extremo
del ansia, de la fiebre y del impacto
es voluntad, empeño, es lo supremo
perfecto para un rito y para un pacto.

Es olvidar de ayer otro paisaje
otra risa en el tiempo, otro latido
amarla es inventar otro lenguaje
con una nueva voz frente a lo ido.

Que salta natural como un polluelo
nacido para ser lo transparente
y es caminar sobre ese terciopelo
que sabe de los besos y el torrente.

Amarla es ser entrega y ser promesa
de la noche en su esfera que me agita
amarla es esperar esa frambuesa
del beso que estremece y que levita.

Es compartir la fe o lo insondable
la rosa que perfuma o las espinas
es comprender que hay algo Inexplicable
que rompe con ternuras las neblinas.

Es esperanza, afán, es la porfía
obstinación sublime, la constancia
es descubrir que hay una geometría
del alma que no acepta la distancia.

Amarla es más que luz, es una estrella
que sabe iluminar pero no quema
amarla es entender que solo ella
es musa y corazón de mi poema.

Ernesto Cárdenas.

miércoles, 12 de septiembre de 2018

La mariposa...


Fue una princesa antigua que escapaba
del hueco de su tumba por encanto
tal vez por una magia que encerraba
un gran amor que fuera sacrosanto.

O fue quizás un sortilegio raro
que provocó a la muerta esa indulgencia
o fue Dios que le puso aquel amparo
de la sombra en un cambio de apariencia.

Pues salió convertida en mariposa
cantando como un ángel de los cielos
por una facultad maravillosa
y con alas azul de terciopelo.

Quiso alegrar al mundo con su canto
que todos soslayaran la amargura
quiso borrar heridas y hasta el llanto
quiso llenar la tierra de ternuras.

Llegó hasta un ser para el feliz asombro
queriendo deleitar a un hombre gordo
y allí cantó posada en aquel hombro
y la aplastó… de un manotazo el sordo.

( Otra versión para un epílogo feliz: )

Cantó dichosa y con dulzura cierta
al corazón humano dio confianza
su canto fue un milagro fue una puerta
divina que dio al mundo una esperanza…

Ernesto Cárdenas.

martes, 11 de septiembre de 2018

Detrás de mi puerta...

Detrás de mi puerta puse una herradura
para que mi dicha la vida liberte
y si piensa el mundo que es una locura
verás como cambia de golpe mi suerte.

Pues sabrás entonces que no es fantasía
vivir esperando la buena fortuna
y sin ser creyente de la astrología
confiar en las fuerzas que oculta la luna.

Porque tengo anhelos que nadie comprende
que van sosteniendo mi larga confianza
y diré en secreto que todo depende
del alma que abrace con fe la esperanza.

Detrás de mi puerta puse una herradura
sin publicidades y sin un testigo
con la llave lista en la cerradura
para cuando quieras vivir tú conmigo.

Ernesto Cárdenas.

lunes, 10 de septiembre de 2018

Para ese amor...


Para ese amor que tengo y que no tengo
que invento desde siempre en mi mentira
para ese amor ésta ilusión sostengo
divina en la esperanza que delira.

Para ese amor que llega y que no llega
que sabe de mi verso y mi manera
para ese amor que entrega y que no entrega
su beso sorprendiendo mi quimera.

Para ese amor pequeño que engrandece
el sueño de mi noche en el motivo
para ese amor que grita y que enmudece
por dentro recordádome que vivo.

Para ese amor que viene y que no viene
trayéndome la paz con su ternura
para ese amor que nunca se detiene
sonando el cascabel de mi locura.

Para ese amor que siento y que me siente
arando soledad en mis dilemas
para ese amor presente pero ausente
para ese amor escribo mis poemas.

Ernesto Cárdenas.

domingo, 9 de septiembre de 2018

Esperó...


Esperó con afán la primavera
la bondad portentosa de ese clima
que era una fantasía milagrera
de música interior como una rima.

Para sentir flotando ese perfume
gustoso de las frutas y las flores
en medio de un sopor que se resume
trazando entre misterios sus primores.

Palpó la tierra, respiró profundo
repleto de emoción por la armonía
captando para sí cada segundo
de aquella natural coreografía.

Y clamó conmovido al arquitecto
de aquella maravilla como un ruego
ser gorrión, otro ser, un simple insecto
con ojos para ver no un niño ciego.

Ernesto Cárdenas.

sábado, 8 de septiembre de 2018

El amor que se aparta...

El amor que se aparta porque sabe que es tarde
no es un amor ficticio, no es un amor cobarde.

No es un amor de miedo, no es un amor que ha muerto
es un amor maduro, es un amor despierto.

Sin ficciones, consiente porque es diferente
y con sed insaciable no se acerca a tu fuente.

Porque quiere cuidarte, quiere paz en tu vida
quiere ver tu sonrisa aunque sangre su herida.

Aunque tome otro rumbo sin dejar de pensarte
recordándote siempre en su sueño y su arte.

El amor que se aleja no es amor pequeñito
es amor que le lanza a la noche su grito.

A la sana manera que a lo tierno se aferra
adorando de lejos con los pies en la tierra.

Porque es verdadero, porque es todo prudencia
por aquello que late y sin embargo silencia.

Prosiguiendo su marcha sin entrar en la huerta
y anhelando tu dicha no atraviesa tu puerta.

Ni se arrima a lo tuyo soslayando el encuentro
aunque tiemble su alma y aunque llore por dentro.

Ernesto Cárdenas.
 

viernes, 7 de septiembre de 2018

Por mis noches...


Por mis noches vago solo
meditando en el silencio
y en la ruta que evidencio
la idea donde enarbolo
el ritual de un protocolo
para un clásico sistema
del conteo, de ese esquema
de sinalefa y de rima
por donde el alma se anima
a darle cuerpo a un poema.
 
Tras la musa que se asoma
inventando un escenario
de magia en el diccionario
para endulzar el idioma
para soltar la paloma
que resulta elemental
para un tema emocional
de consonancia y latido
que le da vida y sentido
a una estrofa espiritual.
 
Y diré que en cada escrito
pongo más que la razón
pongo rabia, abnegación
pongo mi nervio y mi grito
le abro paso al infinito
de mi sueño sin medida
por donde suelto la brida
del verso que escribiré
porque siempre rimaré
aunque me duela la vida.
 
Ernesto Cárdenas.